El liderazgo es clave a la hora de crear equipos de trabajo productivos y cohesionados, así como para mantener a la plantilla de una empresa motivada por su trabajo. En ocasiones, las compañías tienden a cargar todo el peso de la culpa de que las cosas no vayan bien en sus trabajadores y la realidad es que, en más ocasiones de las que realmente se admite, los directivos no saben cómo ser buenos líderes. Ser líder no significa nacer con ciertas cualidades, aunque es verdad que ciertas personas tienen una actitud casi innata de liderazgo. A ser líder también se aprende y hoy queremos contarte algunas de esas lecciones importantes de liderazgo que te resultarán muy útiles en tu empresa. Nos basamos en uno de los libros más importantes de cultura empresarial; "Los líderes comen al final", de Simon Sinek. En caso de que todavía no lo hayas leído, es una lectura recomendada.
Lecciones de liderazgo de Simon Sinek
- Cultura empresarial para todos: las empresas que presumen de un buen liderazgo tratan a todos por igual. De hecho, en las grandes crisis y quiebras empresariales, se demostró que en parte el trato desigual a quien daba menores beneficios, o ignorar a clientes pequeños que apenas reportaban números a la empresa fue el comienzo de que todo lo demás terminase por resquebrajar. En realidad, una empresa está formada por clientes y trabajadores que unidos son la base del negocio. Si el trato es desigual, la cultura de la empresa se tuerce por la base y, tarde o temprano, es probable que esa base acabe llevándose por delante también a la cúpula.
- El líder marca la cultura de la empresa: aunque la cultura empresarial es algo que depende de todos los miembros de la empresa, en realidad nos encontramos con que cómo sea y cómo se muestre el líder va a marcar las pautas que sigan los subordinados, al menos dentro del terreno laboral. La compañía no puede pretender dar una imagen de transparencia ante sus trabajadores si el líder directo de estos no lo es. Lo mismo para cualquier otra cualidad. Resulta muy importante la formación del líder en cuanto a la cultura empresarial para que pueda transmitirla de forma clara a los empleados.
- Integridad y confianza en el líder: si el equipo de trabajo no confía en su líder, difícilmente se pueden lograr resultados satisfactorios de los que el grupo se sienta orgulloso. En ese sentido, la integridad es una cualidad que debe tener un buen líder. De nada sirve que un líder diga una cosa y haga otra, o de charlas acerca de lo que está bien si luego en su día a día va a actuar más o a cometer injusticias. Todo ello pasa factura a los demás miembros que dejan de confiar en él minando la empatía en el grupo de trabajo.
- Amistad: no hace falta que los equipos de trabajo sean los más amigos de su líder. Sin embargo, tener una relación de amistad entendida como la valoración de las cualidades del otro y el aprecio por su persona pueden ser claves en los peores momentos. En las buenas todo el mundo parece estar. En las malas es cuando se nota la ausencia de la mayoría. Sin embargo, ante un líder amigo, la mayoría del equipo de trabajo se mostrará consciente de la situación y ofrecerá el apoyo incondicional que se necesita para superar, juntos, esos malos momentos.
- Dirigir personas: sobre todo en las grandes empresas la inmensa cantidad de trabajadores que hay en plantilla hace que líderes y directivos piensen más en números que en nombres. Esto es un claro error de liderazgo. Si tratas a las personas como números, y no eres consciente de las necesidades y deseos de cada uno de los miembros de un equipo de trabajo, es muy probable que al final te encuentres con que responderán igual que números. No habrá compromiso, no habrá empatía y, tampoco se solidarizarán cuando las cosas no vayan tan bien.
El liderazgo en equipos freelance
Todas las lecciones de liderazgo que hemos explicado en el párrafo anterior pueden tener una aplicación en el mundo de la contratación freelance. De hecho, es bastante habitual en los tiempos actuales tener equipos de trabajo freelance que deben colaborar entre sí para llevar a cabo un proyecto concreto. Los equipos de trabajo a distancia, al igual que los que trabajan en sede requieren de un líder de proyecto que les ayude a resolver dudas, a enfocar los diferentes aspectos hacia el resultado común, y sobre todo, que les inspire, que les motive y, que les haga sentir parte del mismo barco. No es fácil encontrar todas esas cualidades de líder en cualquier profesional que contrates. Sin embargo, hay muchos con grandes dotes de líderes esperando a que seas tú quien les encuentres y sepas darles el proyecto justo en el que demostrar sus mejores facultades. Contratar al primer freelance y darle proyectos específicos en los que te demuestre sus conocimientos y formas de trabajo es el primer paso para encontrar a tu lider de equipo. Una vez la relación laboral avance, puedes ver cómo se mueve con otros freelance o trabajadores en sede en trabajos coordinados. Si de verdad es lo que estabas buscando lo sabrás enseguida, ya que las cualidades de un buen líder saltan a la vista. ¿Todavía no las conoces? Echa un vistazo a este artículo sobre las cualidades del liderazgo y accede a Nubelo para empezar a contratar tu equipo de profesionales de forma sencilla.
